Nacho Abad, col·laborador de ‘Espejo Público’, enfada a les xarxes per una enquesta sobre una violació

 

Uno de los periodistas más reputados del panorama nacional es Nacho Abad, excolaborador de ‘El programa de Ana Rosa’ y actual miembro de ‘Espejo Público’. El periodista no teme entrar en barrena y rescatar de la oscuridad los temas más duros y difíciles. En esta ocasión, sin embargo, puede que se haya excedido un poco y haya cruzado una línea innombrable que puede granjearle muchos detractores.

 

Y es que, como informa ‘Ecoteuve’, a raíz del inicio del juicio a La Manada, el periodista ha querido plantear un debate muy peliagudo. A los jóvenes se les acusa de violar de forma conjunta a una chica durante los sanfermines del año pasado, y Abad ha querido preguntar a los usuarios de Twitter si creen que fue una violación o sexo consentido.

 

Criticado aunque parcialmente en lo cierto

Su pregunta ha generado reacciones muy diversas y muchos critican que parece que esté frivolizando de un tema que, en realidad, es muy serio. Al final, por la presión a la que se ha visto sometido ha acabado eliminando el tuit, aunque antes ha defendido que existe una cosa llamada «presunción de inocencia» y que, por cómo está constituido el sistema legal, se debe aplicar en todos los casos, incluso en los más claros y aberrantes.

 

De hecho, Abad no yerra, pues el sistema penal se basa en un criterio sencillo: la acusación debe demostrar la culpabilidad de la parte imputada, y no al revés, no debe ser el reo quien demuestre su inocencia. Abad añadía, además, que cualquiera merece «derecho a la defensa y derecho a un juicio justo», independientemente del delito que se le impute. Aún con todo, han sido muchos los que se han sentido incómodos con la pregunta, incluso personalidades conocidas como la actriz Leticia Dolera, quien muy indignada comentaba: «¿De verdad jugamos con esto?».

 

El tema, ciertamente, no se ha tratado con el tacto y la forma que una situación tan complicada requiere y, la verdad es que, independientemente de la intención de Abad o de su razón sobre la presunción de inocencia y el derecho a un juicio justo, todo parece indicar que se ha propasado y que ha relativizado un tema muy doloroso y difícil de abordar.

  

 

 

 

 

 

 

 

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